Amantes de los cristales, de las texturas naturales y del preciosismo mineral, ¡este tutorial va por vosotros! Ha llegado el momento de iniciaros en una técnica con la que conseguiréis simular piedras naturales con pintura.
Malaquitas, ágatas, amatistas, lapislázulis… Muchas son las piedras que podréis reproducir a partir de ahora.
Habitualmente esta técnica se trabaja con tintes especiales, pero como nos gustan las cosas fáciles y las queremos YA, aquí la he adaptado a las Chalk Paint porque secan ultrarápido y sirven casi para todo. Así podréis aplicar la idea sobre el objeto o superficie que os dé la gana.
Parece mentira lo que da de sí un cartón y algo de pintura húmeda…
De hecho el concepto de juguetear con ella mientras todavía está tierna, ya lo habíamos visto cuando te hablé de estas 5 texturas modernosas con Chalk Paint. Tendencias al alcance hasta de los que no han cogido un pincel en su vida.
LOS MATERIALES NECESARIOS SON BIEN POCOS Y PUEDE QUE YA LOS TENGAS:
- Chalk Paint en los tonos Piel de Mar y Casi Negro
- Pasta Ferro ¡Es un plus!
- Barniz ultramate
- Varios trozos de cartón corrugado
- Un recipiente con algo de agua
- Paletina o brocha y pincel bien fino
ALGO A TENER MUY EN CUENTA, ES EL TEMA DE PREPARAR LA SUPERFCIE BARNIZÁNDOLA
¿Por qué es tan importante? Resulta que las Chalk Paint son pinturas al agua indelebles una vez están secas. Es decir, que no se borran ni vuelven a diluirse con agua cuando han secado por completo. Aunque también, resulta que son especialmente porosas y eso te podría hacer la puñeta.
Si no barnizas la superficie que hayas pintado o esponjado con chalk, cuando vuelvas a aplicar el siguiente color encima, teñirá la base y no conseguirás que se noten las marcas de arrastre del cartón.
En las muestras del tutorial se ha jugado con verdes, negros y blancos para reproducir malaquitas y un par de piedras ficticias pero recuerda que la técnica funciona con cualquier otra gama de tonos.
¿Tú también querrías probarla con azules y con morados? ¡Yo me muero de ganas!
Por ahora ha caído este set de cuadros que ya luce en el salón.
Mola tantísimo que ya estoy recopilando inspiración para el próximo proyecto en el que use la técnica. ¿Quieres verla?
Puedes tunear cajas con una falsa malaquita para decorar o regalar. Y también marcarte un maxi cuadro en el que se simule el corte de una ágata con vetas en varios tonos.
Esta idea enamora. ¡Qué preciosidad de reloj DIY!
Y si pintas una pared con efecto malaquita o cubres el sobre de una mesa, elevarás el nivel de tu casa al del lujo asiático.
Como ves hay tantas posibilidades como “víctimas” tengas por tunear. Es más, próxima misión: Conseguir hacerlo sobre tela. ¡Necesito una sudadera rocosa y a lo “sport-glam“ en mi vida. Y tú, ¿a qué lo aplicarías?
Diana Pinceles & Grapas says
GUAUUUUUU me encanta, seguro que lo hago.
Graciassss
Paula Piqueras says
¡Venga! Queremos verlo 😛
txell says
me rechifla!